Con la participación de países como Argentina, Chile, Brasil, Bolivia, Colombia, México, EEUU entre otros, se desarrolló este 25 y 26 de agosto el "Encuentro internacional: ciudades sostenibles y cambio climático", en la ciudad de Lima.

Más de 100 participantes provenientes de distintas regiones del país y de Latino América, se dieron cita para participar y conocer las diversas propuestas, programas y proyectos específicos vienen desarrollando muchos países en temas referidos a la reducción del Gas de Efecto Invernadero - GEI, la Eficiencia Energética - EE, el manejo de los residuos sólidos -RS y la conservación de la biodiversidad,  que a su vez contribuyen con la construcción de un concepto de ciudad sostenible y resiliente frente al inexorable camino del cambio climático.

Algunas iniciativas como la de SOROCABA - la ciudad de la biodiversidad - en Brasil (con más de medio millón de habitantes),  muestran que no es imposible soñar con ciudades inclusivas que viven en armonía con la naturaleza, pero que señalan "es clave trabajar con la decisión y convicción política de cambiar y desarrollar planes a largo plazo", con metas específicas que permiten la materialización de acciones. Les tomó casi 20 años construir esta ciudad modelo, pero que ahora, a la luz de los cambios, tienen una comunidad más sana.

Asimismo, la Agencia Chilena de Eficiencia Energética, mostró con documentos y con una serie de procesos validados de experiencias pilotos, que la reducción de GEI y la optimización de energía, les están generando ahorros en el gasto fiscal. Es decir, ahorran y gastan menos energía de la naturaleza, implementando acciones concretas como el cambio de luminarias en las ciudades, por unas más ahorradoras, entre otras medidas.

Pese a las interesantes propuestas que han presentado los países, incluido el Perú con las iniciativas del MINAM y la asociación público-privada, los grandes ausentes fueron las autoridades regionales, provinciales y distritales. Esto demuestra el poco interés que tienen nuestros gobernantes frente a los problemas globales y el bajo compromiso para hacer frente al cambio climático. Hacia donde vamos? Si no se tienen iniciativas para proteger nuestro ambiente, de qué sirven las grandes infraestructuras de cemento, si no se construye una relación más cercana con la naturaleza?. Solo seguimos destruyendo el lugar donde vivimos.